jueves, 29 de septiembre de 2011

¿Fue la doctrina de la Trinidad inventada por la Iglesia Católica?



Sin duda alguna usted habrá leído a los oponentes de la doctrina de la Trinidad exponiendo sus teorías al respecto de cómo ésta fue “formada” o “inventada”. La más popular de esas teorías dice que la Trinidad fue maquinada por la iglesia católica. El adagio popular dice que una mentira repetida muchas veces se transforma en una verdad, aunque en realidad debería ser más obvia la noción de que una mentira repetida muchas veces sólo demuestra que quien la repite es un mentiroso.

En líneas generales, el argumento expresa que la doctrina de la Trinidad fue formulada en el 4to. siglo, en el Concilio de Nicea (325 d.C.), bajo el patrocinio del emperador Constantino. Fue a partir de ese entonces que fue impuesta a las masas por la iglesia católico-romana (que para ese entonces era una iglesia apóstata, se nos dice).

Bien se ha dicho que no existe peor mentira que aquella que contiene algo de verdad. Digo esto porque este argumento antitrinitario es precisamente una mezcla de verdad y error. Tengamos presente una realidad inescapable: Ningún antitrinitario ha sido enfrentado con una exposición clara de la historia de la iglesia, y si algunos han tenido la oportunidad de estudiarla, es obvio que han negado el testimonio de la historia. No solamente son herejes, sino también revisionistas históricos.

Yo he llegado a la conclusión de que aquellos antitrinitarios en posiciones de liderazgo que señalan hacia la iglesia Católica y Constantino como los promotores de la Trinidad, han fabricado ex-profeso una defectuosa representación histórico-teológica porque les es más fácil batallar contra una mentira que contra la verdad.

Primero que nada, no existió una “Iglesia Católica Romana” con una estructura jerárquica, es decir, un obispo en Roma con jurisdicción sobre muchas iglesias en una amplia área geográfica, hasta finales del siglo sexto. En verdad, el obispo de Roma ni siquiera estuvo presente en el Concilio de Nicea, cuya concurrencia estuvo exclusivamente formada por obispos de las iglesias del este. Fue cientos de años después de Nicea que la historia reporta los primeros vestigios de una organización con alguien en Roma funcionando como cabeza de la Iglesia Católica, o sea, algo similar a lo que vemos hoy.

Segundo, la doctrina de la Trinidad como tal, o sea, producto de la cuidadosa examinación de la Biblia y con la terminología esencial que conocemos hoy, la encontramos mucho antes de Nicea. Los términos “tres personas – una sustancia – trinidad” fueron usados por Tertuliano, quien escribió entre el 200/220 al 240 d.C. Esbozos bastantes definidos de la Trinidad pueden ser encontrados también en los escritos de Teófilo de Antioquía (115-181 d.C.), Hipólito (170-235 d.C.) e Irineo (120-202 d.C.). Si bien el término Trinitas fue popularizado por Tertuliano en el contexto de su debate con el hereje modalista Praxeas, él no fue el primero en usar el vocablo. La primera mención de la palabra que tenemos en forma escrita data del 160 d.C., por mano de Teófilo en su epístola a Autólico.

Tercero, muchas de las doctrinas esenciales de la fe cristiana se formaron a través de un desarrollo histórico similar al de la Trinidad. Entiéndase bien, y aclaro porque el antitrinitario tiene usualmente dificultades de comprensión, que no estoy diciendo que tales doctrinas fueron “inventadas” en determinado momento de la historia. Más bien estoy diciendo que a medida que el tiempo avanzaba surgían nuevos ataques a la fe cristiana original, lo que llevaba a los defensores de la fe a codificar o formular estas doctrinas en sucesivos concilios y declaraciones.

Por ejemplo, los libros del Canon del Nuevo Testamento no fueron listados hasta recién el siglo cuarto. Hubo que hacer esto porque muchos herejes agregaban o sustraían libros de la Escritura. Del mismo modo, la Escritura no dice explícitamente que su contenido es inerrante en asuntos históricos y temas científicos. La inerrancia de la Escritura fue formulada recién en el siglo 19 como respuesta a aquellos teólogos liberales y escépticos que propusieron que la Biblia no era inspirada y contenía errores. Fue así como ciertas doctrinas que son enseñadas en la Escritura fueron finalmente “formuladas” (recibieron una estructura y definición formal u oficial) como respuesta a ciertas herejías.

Lo mismo sucedió con la Trinidad, la cual fue formulada para evitar o contrarrestar los errores del arrianismo y el modalismo. La próxima vez que un sectario le confronte con el clásico caballito de batalla “Constantino- Roma”, hágale saber la verdad con amor y firmeza. Quizá el Espíritu de Dios obre para que este amigo sea trasladado de las tinieblas al reino de su amado Hijo.

Hoy por hoy, la doctrina de la Trinidad sigue siendo salvaguarda contra las diferentes herejías, las antiguas y las modernas, y por ello persistimos diligentemente en enseñarla. <>

Es el libro del Momón creíble?


Es el Libro de Mormón creíble? por Hank Hannegraaff
En 1823, el ángel Moroni supuestamente visitó el profeta mormón Joseph Smith y divulgo la ubicación de algunas planchas de oro que contenian la “plenitud del evangelio eterno.” Estas placas, compendió Moroni y su padre, Mormón, 1.400 años antes-fueron escritos en ” los jeroglíficos egipcios reformados. “Junto con las placas, Smith encontró un par de anteojos mágicos que utilizó para traducir la escritura críptica en Inglés. El resultado fue una nueva revelación llamado Libro de Mormón y una nueva religión llamada mormonismo .
¿Cuántos millones puede tomar el Libro de Mormón  en serio? es casi incomprensible. En primer lugar, mientras que Smith se refirió al Libro de Mormón  como “el más correcto de todos los libros sobre la tierra y la piedra angular de nuestra religión”, sus defectos van desde lo serio a lo ridículo. En la categoría de grave, el Libro de Mormón  contiene un lenguaje modalista que milita en contra de la doctrina bíblica de la Trinidad (Éter 3:14). En la categoría de tonto, un hombre se esfuerza por recuperar el aliento después de que le corten la cabeza (Éter 15:31).
Por otra parte, mientras que la arqueología es un poderoso testimonio de la exactitud de la Biblia, lo mismo no se puede decir para el Libro de Mormón. No sólo no hay evidencia arqueológica de una lengua como la “de los jeroglíficos egipcios reformados,” no hay apoyo arqueológicos de las tierras, tales como la “tierra de Morón” (Éter 7:6). Tampoco hay ninguna evidencia arqueológica para respaldar la idea de que los jareditas, nefitas y lamanitas emigraron de Israel a las Américas. Por el contrario, la arqueología y la antropología demuestran de manera concluyente que la gente y los lugares narrados en el Libro de Mormón  son poco más que el producto de una imaginación fértil.
Finalmente, Joseph Smith afirmó que las planchas de oro fueron traducidas “por el poder de Dios” y produjo “el más correcto de todos los libros sobre la tierra.” Joseph F. Smith, sexto Presidente de la Iglesia Mormona, fue tan lejos como para decir que las palabras no sólo fueron correctas, pero “cada carta fue entregada a [Smith] por el don y el poder de Dios.” En realidad, sin embargo, el Libro de Mormón  ha tenido que ser corregido miles de veces para compensar la mala gramática de Smith y ortografía.
El Libro de Mormón  está lleno de errores también. Por ejemplo, “Benjamin” fue cambiado a “Mosiah”, cuando los líderes mormones se diero cuenta de que en la cronología del Libro de Mormón,  el rey Benjamín había muerto, por lo tanto ya se habría dificultades para “interpretar” los grabados mencionados en Mosíah 21:28 .
Tal vez la mayor grieta en la credibilidad del Libro de Mormón  es que secciones enteras se derivan directamente de la versión King James de la Biblia, esto a pesar de que, de acuerdo a la cronología de Mormón, el Libro de Mormón es anterior a la versión Reina-Valera por más de mil años. No es de extrañar que los mormones aceptan el Libro de Mormón sobre la base de un “ardor en el pecho” en lugar de la historia y la evidencia.
Es el Libro de Mormón creíble? por Hank Hannegraaff.Christian Research Institute
DIOS LOS BENDIGA
Edgar Trevino

jueves, 8 de septiembre de 2011

Preguntas y Principios . . . .


1.- Qué es la sabiduría?
La sabiduría es la clave de una vida de belleza, satisfacción y propósito Proverbios 3:15-18.  La sabiduría es el arte de vivir en todo bajo el dominio de Dios. Es la habilidad de usalos mejores medios en los los mejores momentos para obtener los mejores resultados.


2.- Cómo seguir las sabiduría?
El tesoro de la sabiduría está en las manos de Dios. Como viene de lo alto, Proverbios 2:6, Santiago 3:17, no podemos conseguirla sino a través de El.

3.- Cuáles son las condiciones para obtener la sabiduría?
La verdadera sabiduría se obtiene cultivando el temor a Dios. Job 28:28 Salmos 86:11, 110:10, Proverbios 1:7, 9:10

4.- Qué es el temor al Señor?
Temer a Dios es tener una actitud de respeto y humildad ante El, Proverbios 15:33.  Es reconocerlo como uestro Creador  y aceptar nuestra total subordinacin a El en todas las actividades de nuestra vida.

5.- Porque son pocos los que desarrollan el temor a Dios?
El sistema temporal de valores de este mundo se basa en lo que se, mientras que el valor eterno de la Biblia está basado en lo que no se ve. 2 Corintios 4:16-18, 5:7.  El primero ejerce una poderosa influencia en nosotros  y luchamos por dejar lo que se ve por lo que no se ve.

6.- Qué nos equipa para escoger el sistema de valores eternos?
Esta decisión se basa en la fe, (creer a Dios pese a las apariencias y circunstancias), porque la fe se basa en la confianza.

7.- Cómo crecemos en la fe?
Nuestra capacidad para confiar en Dios es directamente proporcional a nuestro conocimiento de Dios.  Mientras más lo conocemos, más podemos depositar nuestra confianza en El.

8.- Cómo podemos aumentar nuestro conocimiento en Dios?
Mientras hablamos con Dios por medio de la oración, nuestra intimidad con El crece. Mientras más conocemos a Dios, más le amamos.